martes, 7 de junio de 2011
Cómo Asesinar a Felipes: El primer golpe de gracia
Cómo Asesinar a Felipes - Cómo Asesinar a Felipes (2008) |
Por Ignacio Silva
Cuando a mediados del año 2008, un emergente sello Potoco Discos anunciaba la salida del disco debut de una nueva banda, nadie pensaba lo que podían llegar a lograr. Menos si dicha banda estaba conformada por tres músicos de escuela, un Dj y un Mc, que juntos trabajaban en mezclar las estructuras del hip hop y el jazz, bajo el nombre de Cómo Asesinar a Felipes.
Tres años después, ese álbum de la banda conformada por Koalas Contreras en la rima, Dj Spacio en las tornamesas, Marcos Meza en los teclados, Sebastián Muñoz en el bajo y Felipe Salas en la batería, se ha transformado en una de las piezas más interesantes que alguna vez se haya escuchado en nuestra música.
El disco comienza con un sampleo de una voz, que parece ser la de Santiago Pavlovic, hablando sobre el asesino que se está por presentar. Inmediatamente, y casi sin tiempo de separación entre ambos tracks – lo que es una de las buenas peculiaridades de este álbum – se escucha una introducción llevada por la batería de Salas, cuyo desenlace conforma el segundo tema del disco; Nada Más, Nada Menos.
Así, uno a uno se van sucediendo los temas, llevados por las notables bases rítmicas construidas por el bajo y la percusión, como en Formo Parte de un Engaño. Además de esto, se van destacando la rima de Koala Contreras , los scratches y sampleos de Dj Spacio, y las armonías provenientes del antiguo Rhodes de Marcos Meza que aportan una mayor profundidad a las composiciones.
Mezclados todos estos ingredientes, dan como resultado un álbum que desde la primera escucha resulta dinámico y entretenido por su fluidez y ritmo, muestra de lo cual son los temas Ya Perdimos la Paciencia, y los frenéticos Lengua en la Llaga y Si te Pillo, te Mato. Quizás para algunos puede resultar difícil de digerir, pero a medida que avanza el número de veces que se escucha, va saliendo a la luz toda la calidad del disco y sus sonidos va quedando en la memoria.
Dentro de los puntos más altos del disco, encontramos los temas En Busca de un Nuevo Sueño, que a estas alturas ya es uno de los clásicos del grupo; Para el Recuerdo de los Nuestros, un tema instrumental que logra conmover con sus oscuros pasajes melódicos; Influencia, primer tema de la banda y que consta de una sólida base jazz y En el Jardín.
En síntesis, el disco homónimo de Cómo Asesinar a Felipes es un trabajo fino, en el cual las rimas y scratches propios de los suburbios, son mezclados de forma perfecta con los sofisticados compases del jazz. Todo esto, sazonado con una letra inteligente y elementos novedosos como la inserción de sampleos de poemas de Nicanor Parra y la inteligente utilización de los recursos gráficos – sobre todo en su versión física -, hacen de este trabajo, el primer golpe de gracia de esta banda de asesinos. Simplemente, una joya.
Tres años después, ese álbum de la banda conformada por Koalas Contreras en la rima, Dj Spacio en las tornamesas, Marcos Meza en los teclados, Sebastián Muñoz en el bajo y Felipe Salas en la batería, se ha transformado en una de las piezas más interesantes que alguna vez se haya escuchado en nuestra música.
El disco comienza con un sampleo de una voz, que parece ser la de Santiago Pavlovic, hablando sobre el asesino que se está por presentar. Inmediatamente, y casi sin tiempo de separación entre ambos tracks – lo que es una de las buenas peculiaridades de este álbum – se escucha una introducción llevada por la batería de Salas, cuyo desenlace conforma el segundo tema del disco; Nada Más, Nada Menos.
Así, uno a uno se van sucediendo los temas, llevados por las notables bases rítmicas construidas por el bajo y la percusión, como en Formo Parte de un Engaño. Además de esto, se van destacando la rima de Koala Contreras , los scratches y sampleos de Dj Spacio, y las armonías provenientes del antiguo Rhodes de Marcos Meza que aportan una mayor profundidad a las composiciones.
Mezclados todos estos ingredientes, dan como resultado un álbum que desde la primera escucha resulta dinámico y entretenido por su fluidez y ritmo, muestra de lo cual son los temas Ya Perdimos la Paciencia, y los frenéticos Lengua en la Llaga y Si te Pillo, te Mato. Quizás para algunos puede resultar difícil de digerir, pero a medida que avanza el número de veces que se escucha, va saliendo a la luz toda la calidad del disco y sus sonidos va quedando en la memoria.
Dentro de los puntos más altos del disco, encontramos los temas En Busca de un Nuevo Sueño, que a estas alturas ya es uno de los clásicos del grupo; Para el Recuerdo de los Nuestros, un tema instrumental que logra conmover con sus oscuros pasajes melódicos; Influencia, primer tema de la banda y que consta de una sólida base jazz y En el Jardín.
En síntesis, el disco homónimo de Cómo Asesinar a Felipes es un trabajo fino, en el cual las rimas y scratches propios de los suburbios, son mezclados de forma perfecta con los sofisticados compases del jazz. Todo esto, sazonado con una letra inteligente y elementos novedosos como la inserción de sampleos de poemas de Nicanor Parra y la inteligente utilización de los recursos gráficos – sobre todo en su versión física -, hacen de este trabajo, el primer golpe de gracia de esta banda de asesinos. Simplemente, una joya.