domingo, 3 de mayo de 2015
Reseñas Clásicas: Supergrass - I Should Coco (1995)
Tres adolescentes británicos frente a una escena de competencias y rivalidades. Así fue como se plantó ante el mundo Supergrass a mediados de los 90’s, una banda con vibra rebelde y alternativa que tenía mucho que decir y hacer frente a los grandes colosos que se enfrentaban en aquella eléctrica época.
Fue por esto que el trío compuesto por Gaz Coombes (voz y guitarra), Mick Quinn (bajo) y Danny Goffey (batería), se animó e incursionó con un sonido brit que no se había desarrollado mucho, uno que estaba más ligado a un rock-pop un poco más escandaloso, algo punk y muy poco convencional. Un sonido diferente, juvenil y fresco.
Claro quedó en 1994. Cuando lanzaron su primer single, 'Caughy by the Fuzz', recibieron todo el apoyo de la BBC Radio 1. De ahí no tardaron los otros reconocimientos de los medios de comunicación.
Es que el disco portador del veraniego, celebrado, característico, premiado y noventero 'Alright' no se queda solo en eso. Básicamente porque fue un debut espectacular, muy bien rankeado y con canciones realmente legendarias. Y no porque sean grandes piezas musicales, de hecho es por todo lo contrario.
Lo que se quería expresar era tan original, versátil y energético que encapsulaba fielmente la imagen de los adolescentes de la época, por lo que no resultó difícil posicionarse en la escena musical británica, e incluso mundial.
Son trece canciones, incluyendo cinco singles. Las hay movidas, las hay un poco más relajadas, unas más pop y otras más rock. 'I’d Like to Know' es el perfecto ejemplo de la melodía más rock-pop sencilla; los singles 'Alright' y 'Mansize Rooster' son la competencia al himno de la alegría. 'Lose it' es algo más oscura, al igual que 'Strange Ones', y la clásica melancolía la encontramos con canciones como 'Sofa (of My Lethargy)'. Hay para todos los gustos.
A pesar de lo anterior, siempre hay un sello distintivo, característico y convincente. Lo acústico y lo completamente electrizante se juntaron de manera perfecta con este trío de Oxford, quienes amenizaban cada melodía con teclados infantiles, los que daban una chispa juguetona e inocente a cada canción de su debut.
En 1995 el brit pop dio la bienvenida definitiva a una banda que prometía convertirse en algo grande, cosa que no solo quedaba definida por su sonido, sino que también por sus presentaciones en vivo, donde demostraban que, a pesar de que eran una banda emergente, su presencia y habilidades eran la de una banda experimentada y, claramente, generacional.
Disco: I Should Coco
Sello: Parlophone
Fecha de Publicación: 15 de mayo de 1995
Por Mel Vargas Albornoz
