miércoles, 13 de agosto de 2014

Reseñas: Spoon - They Want My Soul (2014)


Así que Britt Daniel y los suyos decidieron hacerse esperar. Al más puro e improbable estilo de Spoon, ni siquiera se molestaron en aparecer en lo que se podría llamar “el año de los regresos” (2013), y recién el 10 de marzo de este año entregaron algún indicio de que finalmente estaban a punto de despertar de su periodo de hibernación.

El tipo de publicidad críptica apuntaba a que el 10 de junio Britt Daniel y compañía: a) morirían o b) sacarían alguna forma de material. Afortunadamente el destino lo quiso de la segunda forma. Nadie falleció y “R.I.P.” constituía las siglas de 'Rent I Pay', el primer tema nuevo de Spoon, a 4 años y medio de un "Transference" que si bien resultó excelente, por primera vez parecía dejar con gusto a poco a la crítica y los fanáticos.

'Rent I Pay', una introducción de batería y guitarras agresivas, pero con la calma atractiva que caracteriza el sonido de la banda, lleva a territorio familiar de inmediato, mientras Daniel plantea algunas reflexiones kármicas. Preparados todos, así es como parte "They Want My Soul", el octavo álbum de estudio de los Cuchara. Y trae más de una sorpresa.

Lo primero, es lo impresionante y satisfactorio que resulta este nuevo material, añadiendo uno que otro nuevo elemento a la ecuación ideal Spoon. 'Do You', el primer sencillo, y 'Knock Knock Knock' conforman el corazón del álbum, lo que demuestra sus cualidades de montaña rusa sonora: movido, entretenido y con varios puntos álgidos.

Además, "They Want My Soul" cuenta con las contribuciones de Alex Fischel, nuevo miembro, venido del proyecto Divine Fits, que comparten con Britt Daniel. Dos formas de comprobar la gran efectividad de su adición son 'Inside Out' y 'Outlier'. La primera es por sentado la mejor canción en el álbum, y la meticulosidad de sus arreglos pareciera dar la impresión de ser aquella canción que les costó más sueño. La segunda, un tema cargado de teclados que traen a la mente sonidos de los años 60’s.

Aproximándonos al final de esta pieza, se encuentra colado 'I Just Don’t Understand', un original de la cantante de origen sueco Ann-Margret, que también paso por manos de The Beatles en una sesión de BBC. Y simplemente es asombroso: el despecho enmarcado en la letra toma fuerza con la voz rasposa de Britt Daniel, junto a los staccatos de piano que vienen y van, y la tartamuda percusión de Jim Eno conjuran uno de los covers mejor ejecutados de los chicos de Texas.



New wave, propulsión a sintetizador y recuerdos son la mezcla que se apodera del cierre de TWMS, 'New York Kiss', donde la narrativa rememora a un antiguo amor y aquel impulso humano, carnal y errante de querer revivir las sensaciones tiempo después que se han ido.

De esta forma They Want My Soul queda concluso en una nota agridulce, de la misma maneraen que el clásico "Ga Ga Ga Ga Ga" (2007) cierra con 'Black Like Me'. Eso también demuestra que es posible trazar más de algún paralelo entre ambas piezas, haciéndolos una especie de compañeros de alma en el catálogo de la banda.

A pesar que las composiciones no salen mucho de la zona de comodidad de Spoon, es ahí donde precisamente se encuentran las fortalezas de la banda. Es que en el ahorro, el minimalismo, la poca concentración de elementos, el quinteto logra sacar las ideas más geniales que abundan sus álbumes. Y "They Want My Soul" no es excepción alguna, levantándose como un triunfo de la simplicidad en un ambiente musical que busca la entretención en lo complejo.

En resumen, "They Want My Soul" debiera pasar a la historia de los de Texas como uno de sus grandes álbumes (junto con "Kill the Moonlight" y "Ga Ga Ga Ga Ga"). En 35 económicos minutos, Spoon firma con 10 canciones invasivamente encantadoras. Al final del día, cuando se habla de “menos es más”, en Spoon esto es casi una política.



Artista: Spoon
Álbum: They Want My Soul
Año: 2014
Sello: Loma Vista












Por Camilo Pérez