lunes, 10 de octubre de 2011

Encuentran muerto a ex integrante de Weezer


Hacia finales de 1996, la banda californiana Weezer había lanzado dos discos: The Blue Álbum (1994) y Pinkerton (1996).

El primero, un éxito instantáneo; el segundo, todo lo contrario. Esta dura contradicción gatilló que los miembros originales del grupo decidieran tomarse un receso por tiempo indefinido, para alejarse de la industria y todo lo negativo que ésta conllevaba.

Sin embargo, la acción de los fieles fans que la banda había logrado acaparar en su corta trayectoria, logró que tres de los antiguos miembros se volvieran a juntar, integrando esta vez a un nuevo músico en las cuatro cuerdas.

Ese nuevo bajista era Mikey Welsh, quien acompañó a Weezer en su segundo respiro, hasta el 2001, cuando decidió retirarse de la música para dedicarse de lleno a su gran pasión: la pintura.

El día de ayer, el mismo bajista que aportó en la misión de darle una nueva vida a Weezer, fue encontrado –paradójicamente- muerto en un hotel de la ciudad de Chicago.

La noticia se supo cuando un funcionario del hotel decidió ir a verlo para darle aviso de que no había abandonado el recinto a la hora acordada, encontrándose con el cuerpo de Welsh en la habitación.

El artista, que tenía 40 años, había llegado hasta ese lugar feliz de poder tomarse un descanso después de tanto tiempo. "He aterrizado sano y salvo en Chicago... estoy muy contento de estar aquí", publicó en su cuenta de Twitter cuatro días antes de su fallecimiento.

El hecho ha golpeado fuertemente a la banda, quienes en su sitio web comunicaron el pesar que sienten a través de frases como "Se ha ido un talento único, un amigo y padre profundamente dedicado y un gran artista, pero nunca lo olvidaremos".

Por Ignacio Silva